Garbanzos con tagarninas, un plato de cuchara delicioso y fácil de preparar
Si no conocías la receta de garbanzos con tagarninas, hoy te voy a enseñar a prepararla y estoy seguro que va a encantar. Tiene un sabor increíble y es de lo más fácil de preparar, y si encima te encantan los platos de cuchara, vas a disfrutar de lo lindo.
Lo normal es que estemos acostumbrados a comer las tagarninas esparragadas o ‘esparragás’ de toda la vida. Una receta tradicional de la provincia de Cádiz y que está deliciosa que también puedes encontrar en mi web. Hoy os animo a que disfrutéis de un plato de cuchara con tagarninas, pero añadiendo garbanzos como elemento principal, y un trozo de hueso de jamón, este le va a otorgar sabor y ese toque que, a los amantes de la cocina incondicional, nos gusta tanto.
La elaboración de este plato de garbanzos con tagarninas es muy sencillo y podéis tenerlo listo en muy poco tiempo. Si no queréis añadir el hueso de jamón, aunque yo os lo recomiendo por el sabor que le aporta, siempre podéis no añadirlo o sustituirlo por un buen trozo de bacon ahumado.
El bacon le otorgará al plato sabor y a la hora de comerlo podremos degustar los trozos de carne tiernos que, combinados con los garbanzos y las tagarninas van a ser toda una locura. Para repetir.
Garbanzos con tagarninas
Dificultad: baja-media
Coste: bajo
Ingredientes: 4-6 personas
– 1/2 kilo de tagarninas
– 350 gramos de garbanzos lechosos
– 1 trozo hueso de jamón preferiblemente ibérico (que algo de jamón también, no solo hueso)
– 1 cabeza de dientes de ajo
– 1 cebolla
– 1 zanahoria grande
– 1 pimiento verde
– 1 trozo de pimiento rojo
– 2 tomates maduros
– 1 cucharada de pimentón dulce
– 1 cucharadita de cominos
– Aceite de oliva virgen
– Pimienta negra molida
– Sal
Preparación de los garbanzos con tagarninas:
Ponemos la noche anterior los garbanzos en remojo.
Hacemos un sofrito con la mitad de los dientes de ajo, media cebolla, el pimiento verde, el trozo de pimiento rojo, una cucharadita de comino, una cucharada de pimentón dulce y los dos tomates a los que les habremos quitado parte de la piel. Todo picado. Lo único que no añadiremos al sofrito es la zanahoria. Que pelamos y reservamos. Puedes ver cómo se hace un sofrito en el enlace a mi receta casera de cómo preparar el mejor un sofrito para tus platos de cuchara.
Mientras se hace el sofrito a fuego lento, ponemos en una olla rápida o exprés los garbanzos en remojo del día anterior, que habremos escurrido, el trozo de hueso de jamón, que habremos limpiado bajo el grifo, y la zanahoria troceada. Cubrimos todo con agua y llevamos a ebullición. Cerramos la olla y dejamos a fuego medio durante 20 minutos.
Mientras se hacen los garbanzos, en una sartén aparte, freímos la otra mitad de dientes de ajos pelados y enteros y las dos rebanadas de pan. Una vez fritas, que no quemadas, las apartamos u las ponemos en el vaso de la batidora.
Una vez tenemos el sofrito, y las verduras están tiernas, añadimos todo el sofrito al vaso de la batidora junto al pan y los ajos. Trituramos.
Podemos no triturar demasiado y dejar algunos trozos, es cuestión de gustos. Reservamos.
Pasados los 20 minutos aproximadamente, apartamos y abrimos la olla una vez hemos quitado la presión y no tenemos problemas para abrirla.
Añadimos el contenido del vaso de la batidora, las tagarninas troceadas y limpias y agregamos sal. No nos pasaremos con la sal ya que el hueso de jamón es salado. Así que pimero probamos para saber cómo están de sal los garbanzos.
Dejamos a fuego medio y añadimos agua, si vemos que tiene demasiado poca, añadimos. La cantidad de caldo variará en función de nuestros gustos, yo prefiero que no estén nadando los garbanzos en caldo. Pero tampoco secos.
Dejamos hervir unos 10 o 15 minutos más, para que las tagarninas se hagan. Si tiene demasiado caldo, dejamos que se consuma hasta que esté a nuestro gusto.
Sacamos el trozo de jamón y desechamos el hueso. Troceamos o desmenuzamos el jamón y lo añadimos a la olla.
Dejamos reposar y listos para servir. Bon appétit!