Cerezas confitadas
¿Has preparado alguna vez cerezas confitadas caseras? Las cerezas confitadas caseras nos valen tanto para decorar tartas y dulces, como para comerlas directamente. Tienen un gran sabor y son muy fáciles de preparar.
Podemos encontrar cerezas confitadas en los supermercados, pero merece la pena prepararlas para que podamos utilizarlas siempre que queramos. El caldo está riquísimo y es totalmente zumo de cereza natural, cuando las probéis no podréis parar de comer.
Cerezas confitadas
Dificultad: muy fácil
Coste: bajo
Ingredientes:
– 1 kilo de cerezas
– 4 cucharadas soperas de azúcar
– 1 litro de agua
Preparación de las cerezas confitadas:
Una vez tenemos esterilizados los botes de cristal para hacer la conserva (ver esterilizar botes de cristal), introducimos las cerezas previamente lavadas y sin el rabito en los botes que vayamos a utilizar. Añadimos a un litro de agua cuatro cucharadas de azúcar y mezclamos.
Rellenamos los botes con el agua azucarada y cerramos bien. Recordar que los botes tienen que cerrar herméticamente para que no entre aire y se pongan malas las conservas.
Si quieres hacer otro tipo de conservas te sugiero que veas algunas otras como la mermelada de higos o la mermelada de tomates. Verás qué ricas!
Ponemos una olla donde entren los botes con agua hasta taparlos y los hervimos durante veinte minutos. Podéis repetir la operación si no entran todos al mismo tiempo.
Los sacamos del agua y dejamos que se enfríen puestos boca abajo durante al menos seis horas. Etiquetamos los botes si queremos y los guardamos listos para utilizarse cuando queramos. Bon appétit!